La enoxaparina IV es más eficaz que la heparina no fraccionada para reducir las complicaciones de la intervención coronaria percutánea

Los resultados del estudio ATOLL mostraron que la heparina de bajo peso molecular, la enoxaparina ( Clexane, ) es más eficaz que la heparina no fraccionada para reducir los episodios isquémicos graves.

Se ha administrado enoxaparina y heparina no fraccionada por vía intravenosa a pacientes sometidos a intervención coronaria percutánea (ICP) por infarto de miocardio con elevación del segmento ST (IAMCEST).

En el estudio participaron 910 pacientes, que fueron asignados aleatoriamente para recibir enoxaparina IV (0,5 mg/kg con o sin un inhibidor de la glicoproteína IIb/IIIa) o heparina no fraccionada IV (50-70 UI con inhibidor de la GP IIb/IIIa) IIIa, 70- 100 UI sin inhibidor de GP IIb/IIIa).
Dos tercios de los pacientes del estudio tenían acceso radial para ICP primaria.

Los resultados a los 30 días mostraron que el criterio principal de valoración (una combinación de muerte, complicaciones por infarto de miocardio, falla del procedimiento o hemorragia mayor) ocurrió en el 33,7 % de los tratados con heparina no fraccionada y en el 28 % de los pacientes del grupo de enoxaparina (p =0,07).

El criterio principal de valoración secundario (mortalidad, infarto de miocardio recurrente/síndrome coronario agudo o revascularización urgente) ocurrió en el 11,3 % de los que recibieron heparina no fraccionada y en el 7,8 % de los que recibieron enoxaparina (p = 0,02), mientras que el criterio de valoración isquémico triple (mortalidad, re -infarto, o revascularización urgente) ocurrió en el 8,5% de los pacientes en el grupo de heparina no fraccionada y en el 5,1% en el grupo de enoxaparina (p=0,04).

Además, el estudio mostró un riesgo del 4,9 % de hemorragia mayor no relacionada con CABG en el brazo de heparina no fraccionada frente al 4,5 % en el brazo de enoxaparina; una diferencia no significativa pero probablemente relacionada con la proporción de pacientes con ICP de acceso radial. ()

Fuente: Reunión de la Sociedad Europea de Cardiología, 2010

2010