La angioplastia primaria proporciona un mejor pronóstico que la terapia fibrinolítica en el infarto agudo de miocardio, pero su uso en hospitales sin cirugía cardiaca es limitado.
El estudio probó la hipótesis de que los pacientes no aleatorizados sometidos a angioplastia primaria presentan resultados clínicos similares a los de un grupo aleatorizado trasladado a centros con cirugía cardiaca disponible para angioplastia.
Se realizó angioplastia primaria en el 88% de los pacientes.
Los pacientes transferidos para angioplastia primaria tuvieron una mediana de tiempo hasta el tratamiento más larga (187 versus 120 min; p < 0,0001).
La trombólisis en infarto de miocardio (TIMI) grado 3 de flujo se logró en el 96 % de los pacientes sometidos a angioplastia primaria in situ y en el 86 % de los pacientes transferidos.
El punto final primario combinado (mortalidad a los 30 días, reinfarto, accidente cerebrovascular con discapacidad) ocurrió en el 5 % (n = 27) de los pacientes tratados in situ y en el 85 % (n = 6) de los pacientes transferidos.
No hubo diferencias en la mortalidad al año, después del ajuste, entre pacientes in situ y transferidos.
Los pacientes sometidos a angioplastia primaria in situ y los transferidos tuvieron resultados similares a los 30 días.
El estudio indicó que la angioplastia primaria para pacientes con infarto agudo de miocardio de alto riesgo en hospitales sin cirugía cardíaca es segura, eficaz y la reperfusión es más rápida que la transferencia a centros con cirugía cardíaca disponible (Xagena 2004).
Wharton TP et al, J Am Coll Cardiol 2004; 43: 1943-1950
cardio2004