Estudio ASPECT-2: Los anticoagulantes orales son más efectivos que la aspirina en los síndromes coronarios agudos

El estudio Anticoagulants in the Secondary Prevention of Events in Coronary Thrombosis-2 (ASPECT 2) inscribió a pacientes ingresados ​​en el hospital por infarto agudo de miocardio o angina inestable, que se presentaron en las 8 semanas anteriores.
El objetivo del estudio fue comparar algunos esquemas terapéuticos (Aspirina, anticoagulantes, anticoagulantes + Aspirina) en pacientes que sobrevivieron a un síndrome coronario agudo.
En febrero de 1999, el estudio se detuvo debido a las dificultades para enrolar pacientes.
Hasta ese momento habían ingresado en el estudio 999 pacientes.
Los participantes fueron asignados al azar para recibir una dosis baja de aspirina (80 mg/día; n = 336), terapia anticoagulante de alta intensidad con fenprocumona o acenocumarol (INR = 3-4; n = 325) o aspirina en dosis baja. tratamiento anticoagulante de intensidad media (INR : 2-2,5; n = 332).
El punto final primario fue la combinación de muerte, accidente cerebrovascular o infarto de miocardio.
El período de observación fue de 1 año.
El criterio de valoración se cumplió en el 9 % de los pacientes del grupo de aspirina (n = 31), el 5,2 % del grupo de anticoagulación de alta intensidad (n = 17) y el 5,1 % de los pacientes del grupo de anticoagulación de alta intensidad. aspirina (n = 16).
El sangrado severo ocurrió en el 1%, 1% y 2%, mientras que el sangrado leve a moderado ocurrió en el 5%, 8% y 15% en los 3 grupos, respectivamente.
Los abandonos, en los que se suspendió la terapia, fueron el 10% en el grupo de aspirina, el 19% en el grupo de terapia anticoagulante y el 20% en el grupo de combinación, anticoagulante + aspirina.
De este estudio surgió que la terapia con anticoagulantes orales de alta intensidad y la terapia combinada, antiagregante plaquetario de intensidad media + Aspirina, son más eficaces que la Aspirina sola en la prevención de eventos cardiovasculares (infarto de miocardio o accidente cerebrovascular) y muerte en pacientes con síndromes coronarios agudos. ( )

VanEs RF et al, Lancet 2002; 360:109-113